Este año 2020 se ha puesto en marcha una nueva ayuda para el autónomo. Esta es la Reserva Asistencial Social.
¿En qué consiste esta ayuda? Se trata de una prestación para los autónomos que tengan algún tipo de enfermedad profesional o hayan tenido un accidente laboral.
El objetivo de esta nueva ayuda es cubrir uno de los temores de los trabajadores por cuenta propia: solicitar la baja laboral.
La Reserva Asistencial Social es, por tanto, un paquete de ayudas que tienen el fin de hacerse cargo de todos aquellos gastos necesarios para adaptar o rehabilitar el lugar de trabajo, así como reformar el local o reparar un vehículo si ha sido dañado durante el accidente laboral.
En este artículo, con el fin de conocer esta ayuda para trabajadores por cuenta propia en profundidad, hablaremos de los tipos de ayudas que ofrece la Reserva Asistencial Social, los sujetos que están protegidos y el cálculo de la prestación.
Tipos de ayudas de la Reserva Asistencial Social
La Reserva Asistencial Social ofrece diferentes tipos de ayudas en función del tipo de accidente laboral o del tipo de enfermedad profesional. Así, se distinguen tres:
1. Ayuda para la recuperación y rehabilitación
Este tipo de ayuda está relacionada con los costes de un ingreso en un hospital o en centro sanitario. Son ayudas proporcionadas en caso de que el accidente laboral conlleve una larga rehabilitación y recuperación.
Esta ayuda comprende por tanto aquellos gastos de estancia, traslado o dietas de la familia y del trabajador que se deriven del ingreso hospitalario. También, se incluyen aquellos costes como los de prótesis y los costes de tratamientos recomendados por el médico que no sea cubierto por la mutua del trabajador autónomo.
2. Ayuda para la adaptación al trabajo y la reorientación profesional
Estas ayudas van ligadas a la formación con el fin de facilitar la reinserción laboral.
Así, si debido a un accidente de trabajo pierdes tu empleo como autónomo, la Reserva Asistencial Social te proporciona un conjunto de ayudas que se destinan al pago de cursos de formación.
De esta manera, el trabajador puede renovar sus conocimientos para que su entrada a un nuevo empleo sea lo más sencilla posible.
Además, este tipo de ayuda también permite adaptar o acondicionar el sitio donde desarrollas tu actividad como trabajador autónomo en el caso de que, tras el accidente, precises cubrir nuevas necesidades.
3. Ayudas para la adaptación y el desarrollo de actividades básicas
La última ayuda está relacionada a los costes que pueden derivarse de la adaptación de la vivienda. En este aspecto, se incluye en la ayuda la compra de una nueva vivienda adaptado o la ayuda para adaptar tu vehículo a las nuevas necesidades que tenga el trabajador tras el accidente laboral.
También, se entiende como ayudas todos aquellos servicios que el autónomo necesita para llevar su vida diaria con total normalidad. Así, si el trabajador precisa de una persona que ayude o apoye en las tareas del hogar, esta ayuda lo cubrirá.

¿Qué sujetos están protegidos por la Reserva Asistencial Social?
Una vez distinguidos los tipos de ayudas de la Reserva Asistencial Social, vamos a proceder a concretar a qué personas se protege con estas ayudas.
Todas las prestaciones y ayudas van a proteger tanto al trabajador por cuenta propia como a su familia, convirtiéndose en ayudas que se extienden, además, a los derechos de sucesión en caso de que, a causa del accidente o la enfermedad laboral, el trabajador haya fallecido.
El cálculo de la Reserva Asistencial Social
La Reserva Asistencial Social se concede al trabajador que se encuentre en un estado de necesidad tras sufrir un accidente laboral o una enfermedad profesional. Así, cada ayuda comentada con anterioridad, será proporcionada al autónomo con unos requisitos distintos.
De esta manera, lo primero que se necesita es un informe sanitario de la mutua que especifiquen cual es tu cuadro clínico tras el incidente laboral.
Una vez obtenido, será la mutua del trabajador la que delimite cuál es el tipo de ayuda que le corresponde y gestionará la petición de estas prestaciones.
La cuantía de la misma va a depender, por tanto, del estado y de las necesidades que tenga el beneficiario de la ayuda.