Facturar al extranjero, ¿cómo debo hacerlo?

Hoy facturar fuera de España es fácil. Por ello, es conveniente conocer algunos detalles, puesto que este tipo de operaciones tienen cada vez más peso en la economía de nuestro país. En esta entrada te explicamos cómo hacer una factura intracomunitaria y cómo facturar a terceros países. De esta manera, te resultará mucho más sencillo tomar decisiones racionales. 

Gestoría autónomo: facturar al extranjero 

Cuando vayas a facturar fuera de España, existen dos fórmulas: las facturas intracomunitarias y a terceros países. Las dos principales circunstancias que has de tener en cuenta son la necesidad de inscribirte en registros específicos y la posibilidad de no repercutir el IVA en la venta. 

Si bien en el pasado este tipo de operaciones estaban muy limitadas, lo cierto es que hoy cualquier tienda online se puede ver en esta situación. Por lo tanto, te conviene, y mucho, saber cuáles son las condiciones de cada caso, lo que tienes que hacer y las ventajas de obtener un asesoramiento profesional.

Te explicamos con más detalle cómo funciona cada una de ellas y los detalles que has de tener en cuenta. 

1. Facturas intracomunitarias

Las facturas intracomunitarias son aquellas que van a realizar a los países miembros de la Unión Europea. La principal particularidad es que se emiten sin IVA, aunque este se vaya a liquidar posteriormente. La denominación técnica es operación intracomunitaria, de manera que no se considera una exportación. Lo mismo pasará cuando compres mercancías en la Unión Europea, aunque luego estarás obligado a liquidarlas. 

Ahora bien, para facturar al extranjero tienes que estar en el Registro de Operadores Intracomunitarios (ROI). Para ello, deberás presentar el modelo 036, concretamente la casilla 582. Si todo está bien, la Agencia Tributaria concede el VIES, que es la identificación para operar. En los últimos tiempos ha habido un cierto endurecimiento en las condiciones que imponen los técnicos de Hacienda para conceder la autorización. 

La manera de compensar la diferencia entre compras y ventas intracomunitarias es la liquidación de IVA que es mensual o trimestral.

2. Facturas a terceros países

Las facturas a terceros países son las exportaciones clásicas y están sujetas a una serie de condicionamientos. En primer lugar, tienes que registrarte a través del modelo 036 como exportador en el correspondiente registro. La principal diferencia de las exportaciones está en que no hay el mismo trato con el IVA en las compras y en las ventas. 

Posteriormente, tendrás que facturar sin IVA. Ahora bien, cuando tengas que comprar sí deberías pagar el IVA aunque después lo puedas desgravar en tu declaración. 

Gana en comodidad en tus operaciones con el extranjero

Si no tienes demasiada experiencia en las operaciones en el exterior es relativamente fácil que te despistes… el problema es que el error te saldrá bastante caro. Por ese motivo, si vas a hacer una factura intracomunitaria o a terceros países te recomendamos que te asesores con profesionales que puedan realizar esta gestión. Una gestoría autónomo como Tu Asesoría en la Nube te ayuda a que el proceso sea más fácil y seguro. 


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